Dados los últimos acontecimientos, el inesperado resultado el 25M de Podemos y la más que generalizada indignación social, los medios ponen su mirada en los grupos independientes, o como lo han llamado: «El germen de la política ciudadana».
Aunque nuestro caso no es el más reciente ni «la novedad», tenemos una mención en el articulo que publica El Correo.
El germen de la ‘política ciudadana’
El viraje electoral hacia movimientos vecinales no es nuevo en la comarca. Tres municipios están gobernados por ellos.
El surgimiento de nuevos partidos y movimientos ciudadanos en las pasadas elecciones europeas no es una realidad desconocida para los vecinos de la comarca. El «distanciamiento» que en ocasiones mantienen las formaciones políticas ante los «intereses vecinales» les llevó en varios municipios a los propios residentes a unirse y a concurrir a las elecciones municipales.En Zaratamo y Orozko las asociaciones vecinales surgieron en la pasada legislatura para sustituir en un caso a EA y en el otro al PNV.
En Etxebarri el asunto viene de lejos. Hace más de veinte años, un grupo de vecinos se constituyó en plataforma vecinal para luchar contra el poder que entonces ostentaba el PSE en la localidad. Estas tres localidades, a día de hoy, están gobernadas por grupos de vecinos que aseguran trabajan «por y para el pueblo», aunque no son las únicas de Bizkaia. Trece grupos de este tipo ostentan alcaldías en la provincia. Según Loren Oliva, alcalde de Etxebarri se puede trabajar «de forma más libre al no tener que seguir ni órdenes ni directrices de las juntas de partidos, alejadas de la realidad y que responden a otro tipo de intereses y estrategias».
Pero, además, les diferencian otras cosas. Las tres formaciones carecen de afiliados, sus simpatizantes no pagan cuotas y deciden su programa en modo asambleario. Se reúnen con cierta periodicidad y votan los elementos más trascendentales. Y no son ni de derechas ni de izquierdas. Consideran que «no es necesario» para gestionar y que se puede «funcionar sin una ideología», según defiende el primer edil de Orozko, Josu San Pedro.
Los primeros «indignados»
El modelo parece haber logrado convencer a los votantes de estas localidades. El de Etxebarri fue el primer grupo independiente que se fundó a nivel de Euskadi. Fueron los «primeros indignados», según les gusta recordar. En octubre de 1990 se creó una plataforma popular que promovió la abstención y que arrasó en las autonómicas al lograr que únicamente el «20%» de los vecinos acudieran a las urnas, recuerda Pedro Lobato, alcalde de la localidad hasta la pasada legislatura.
En Orozko, Adie surgió como «necesidad de comunicación» y en cuatro meses alcanzó el gobierno. «El Ayuntamiento era un espacio cerrado, no sabíamos que pasaba allí dentro ni cómo se gastaba el dinero, ahora tenemos una mayor transparencia», apunta San Pedro.
A menos de un año de una nueva cita con las urnas, y echando la vista atrás, en Zaratamo y Orozko únicamente aprecian como negativo de la experiencia la falta de colaboradores. «Los partidos no tienen problemas de gente porque viven de ello. Nosotros sí, no hay tanto compromiso», explica Jon Ajuria. Para luchar contra la fuga de talentos recuerdan que cualquiera puede acudir a sus asambleas. «Lo importante no es el candidato. Cualquiera que esté ilusionado, aporte ideas y trabajo puede venir aportar savia nueva», insisten.
Link al artículo: El germen de la «política ciudadana»